Dos recetas rápidas que te salvarán la vida (o al menos, la comida)

Que levante la mano quien no se haya visto en esta situación. Dos de la tarde de un sábado o un domingo, empezamos a estar hambrientos y no hay nada preparado. ¿Hoy qué comemos? A mi cuando viene el buen tiempo me pasa bastante a menudo. Intento organizarme y dejar la comida preparada después del desayuno -soy bastante organizada, la verdad-. Pero muchas veces las ganas de salir a dar un paseo slow, disfrutar del sol en el parque con las peques o irte de compras, hacen que el tema comida lo deje para luego y claro, pasa lo que pasa: llega la hora y, o comes fuera de casa o te toca improvisar algo rápido.

Sin duda la pasta creo que es uno de los alimentos más rápidos de preparar y más socorridos, ¿o no? En poco minutos cualquiera puede improvisar unos espaguetis a la carbonara, unos tallarines con gulas y gambas al ajillo o unos macarrones a la boloñesa. Y normalmente es una comida que a todos suele gustar en casa. Pero yo hoy os voy a proponer una manera distinta de comer pasta, rápida de preparar y que apenas necesita elaboración. Os cuento cómo hacer una rica ensalada de macarrones con virutas de jamón, picatostes, aceitunas negras, queso parmesano y salsa al pesto. ¿Os apetece?

Necesitaréis lo primero pasta, claro está. Yo prefiero macarrones de los gordos pero en realidad podéis utilizar cualquier pasta que tengáis en casa. También necesitaréis virutas de jamón, yo suelo tener varios paquetes en la nevera que compro en la charcutería envasados al vacío; picatostes, si son fritos mejor; aceitunas negra, sin hueso para facilitar la tarea a los más peques; queso parmesano, para rallar en el momento o ya rallado y un bote de salsa pesto. Lo más complicado será cocer la pasta y darle el punto que te guste, porque el resto es añadir los ingredientes y mezclar. Y tendrás una rica y apetecible comida en un pis pas.

Y ahora os contaré otro truco para improvisar una rica cena que seguro os encantará. Minipizzas con masa de empanadillas. Es algo que puedes tener y que te permite hacer minipizzas con cualquier ingrediente que tengas en casa. Mientras preparas los ingredientes que vas a usar metes en el horno a 200 grados, durante 4 ó 5 minutos, las masas de empanadillas con un poco de salsa de tomate, albahaca u orégano y un chorrito de aceite de oliva. Para el relleno puedes usar todo lo que se ocurra: atún, salmón ahumado, jamón, piña, tomate natura, salami… Colocas tus ingredientes encima y antes de meterlas de nuevo en el horno coloca una buena capa de queso rallado por encima o queso de cabra, si te gusta. En diez minutillos, dependiendo de la potencia de tu horno, tendrás lista una cena espectacular.

Espero que estas dos recetas fáciles os solucionen la papeleta en alguna ocasión. ¿Os apetece compartir alguna recetas con nosotras? ¡Somos todos oídos! 🙂