Muchas veces cuando pensamos en talentos pensamos en grandes cosas, esas que cambian la vida. Dibujar como dios. Ser la reina del teatro. Programar como un profesional. Y así nos frustramos, claro, porque aquí no somos genios ninguna, sino gente de andar por casa. Pero todos, y digo todos, tenemos algún talento, alguna cosa que por chorra que parezca no sabe hacer todo el mundo. Así que el post de hoy va de nuestros grandes talentos ocultos y poco valorados. ¿Nos cuentas cuál es el tuyo en los comentarios?
Recoger cualquier cosa con los pies (Sara)
Yo no sé si es innato o trabajado, pero sí que sé que mi capacidad para recoger cosas con los pies no es tan común como yo pensaba. En mi caso cuando algo se me cae al suelo rara es la vez que me agacho a cogerlo. Lo normal es que lo enganche con los deditos (porque siempre voy descalza por casa) y lo suba. En un segundo. Da igual que sea algo grande o pequeño ¡tengo una gran destreza!
Mi memoria fotográfica (Let)
A veces es una bendición y, en otras ocasiones, una verdadera tortura porque a nadie le gusta que le recuerden cambios de opinión, por ejemplo. Y es que esta memoria fotográfica mía va en dos direcciones: la primera, como siempre digo, no me cuentes nada que no quieras que recuerde; la segunda, hago fotos mentales y así es como consigo recordar dónde he dejado las cosas. Esto último lo perdí un poco con la crisis de estrés del año pasado, pero ahora parece que mi talento está volviendo a mí. Solo tengo que tenerme paciencia.
Mover las aletas de la nariz (Merak)
Me siento la hermana lerda de esta familia que es MMM. Todas mis compañeras promocionandose como si no hubiese mañana y vanagloriandose de sus virtudes más o menos ocultas y aquí la menda poco puede aportar y, sobre todo, ningún superpoder digno de mención. Soy lo que veis -“ni más, ni menos, ni más, ni menos”, que diría la canción- y mi poco glamuroso talento oculto es… mover las aletas de la nariz. PD: ¡Ah! que inquerido al respecto, mi marido dice que toda yo soy en mí misma un talento oculto. ¡Qué majo él! Os dejo, que le voy a agradecer el cumplido.
Cantar (Pilar)
Vale, este talento puede que no sea tan útil como la memoria fotográfica de Let o lo de mover las aletas de la nariz de Merak 🙂 pero oye, me venía muy bien cuando estaba en la universidad y necesitaba sacarme un dinero para mis gastos. Y también lo he utilizado para muchas otras cosas: calmar a mis hijas cantando desde bebés, ir a la clase de mi hija mayor a cantar con los preadolescentes más simpáticos del mundo, entretener las fiestas familiares y de amigos cada vez que alguien saca una guitarra…¡incluso estoy preparando un vídeo cantando para celebrar el séptimo aniversario de mi blog!
Soy capaz de dormir en cualquier sitio (Nat)
Mi facilidad para dormir en cualquier sitio y de cualquier forma no tienen límites. Vamos estoy segura de que si me propongo dormir de pie también lo consigo, lo que pasa es que aún no me he decidido a intentarlo. No soy nada exquisita ni con el tipo de cama, ni con el colchón, ni con la almohada… ¡para dormir todo vale! Si me quedo frita en el autobús, sueño y todo. Y me duermo en décimas de segundo, por muchos despertares nocturnos que tenga. Si las niñas se despiertan veinte veces, veinte veces me duermo antes de volver a la horizontal.
Puedo hacer de enfermera (Ruth)
Debe ser algo genético, pues mi madre y mis tías son enfermeras. La cuestión es que mientras otras madres se desmayan con la sangre, heridas varias, golpes, picaduras, cortes grandes o pequeños…yo puedo mantener la calma, hacer de tripas corazón y curar lo que se me ponga por delante. Cortar piel muerta, buena lavada de la herida, suturas, pinzas, bisturí, nada se me resiste. Otra cosa son las guarrerías varias, tipo intestinos fuera o huesos que asoman: ahí mi lado escrupuloso gana al talento oculto.
Sexto sentido (María Jardón)
Desde que soy madre es cierto que lo tengo bastante oxidado porque ni me paro a escucharlo ni lo “ejercito”, pero hace unos años lo tenía bastante desarrollado. Muy a menudo tenía presentimientos de cosas que podían pasar y se me daba bastante bien echar las cartas. La verdad es que no sé hasta qué punto realmente tengo un sexto sentido mayor que otras personas o simplemente es que confiaba en él y me paraba a escucharlo. Quizá cuando mi vida deje de ser un maratón desde que me levanto y tenga tiempo, pueda volver a trabajarlo y recuperarlo.
Fotos: Pixabay
¿Quién es la de enfermera?
Yo podría de cir que comparto talento con Nat; llegué a dormirme en una discoteca sonando lo más cañero. Y lo de dormirme en el bus es mi pan de cada día, en un trayecto de 4 km. Quizá debería dormir más por la noche.
Nuestra enfermera es Ruth, Noelia. Editado para que lo sepa todo el mundo 😉
Yo ya he comprobado que sé dormirme de pie xD así que comparto con vosotras esa característica.
Gracias por pasarte.
Mi marido diría de mi que no me despierta nadie, al menos antes de que naciera mi hija. Y tenía razón, era dormir y parecer que estaba en coma.
Creo que mi talento es acordarme del nombre y caras de todo el mundo. De gente corriente, de las series… Me acuerdo del nombre completo de mucha gente con la que estudié hace ya más de 10 años…
Eso tampco se me da mal, aunque hay partes de mi vida que no recuerdo muy bien.. creo que reseteé porque no tenía cosas muy bonitas que rememorar.
Yo tengo memoria fotográfica,me duermo en cualquier sitio y me gusta mucho leer en alto y hace discursos,un besazo
Guau!!! cuatro grandes talentos en una sola persona 😉