Varios cientos de personas llevan varios meses dándole vueltas a esta idea ¿este es el momento de volver al pueblo? ¿por qué no vivir rodeado de naturaleza, pagar menos alquiler o quitarme la hipoteca y conocer a los vecinos como se hacía antes?
Ha tenido que llegar una pandemia mundial para que el teletrabajo se impusiera en algunos sectores, para que la Unión Europea planteara un paquete de medidas (básicamente inversiones económicas que es lo que se necesita) para desarrollar el Green Deal y la digitalización, para que la Agenda 2030 se impulsara de forma más concreta y sobre todo para que la opinión pública esté realmente sensibilizada con el medio rural.
Según muchos análisis que se han hecho al respecto este año va a suponer una gran oportunidad para los territorios rurales, para la llamada “España vaciada” y en el fondo es algo que nos va a beneficiar a todos pero sobre todo a aquellos que han decidido que este es el momento de volver al pueblo y dejar la ciudad.
Tras pasar meses sin poder salir de casa, sin terrazas o balcones, sin más vistas por las ventanas que las de los patios de luces, para muchos ha llegado el momento de huir al campo. Aire libre, casas más espaciosas, contacto con la naturaleza, silencio cuando se necesita, ausencia de contaminación y para algunos todo eso sin tener que renunciar a su trabajo que pueden hacerlo igual en un piso en medio de la ciudad que en una casa en medio del campo.
¿Por qué crees que es para ti el momento de volver al pueblo?
Hay distintos motivos y distintas razones que mueven a distintas personas a tomar esta decisión que supone sin duda alguna un cambio de vida.
Hay quien quiere mudarse al pueblo sin modificar su actual vida para vivir en un entorno mejor, para reducir el ruido y el exceso de luz, para cuidar su salud física y mental, para aumentar el contacto con la naturaleza. Hay quien busca introducir un cambio como tener un pequeño terreno, un poco de espacio alrededor.
La tecnología ayuda a este cambio, hay webs incluso que orientan a las personas que han decidido emprender este camino de mudarse al pueblo y les ayuda a elegir qué pueblo les ofrece lo que andan buscando e incluso les ofrece posibilidades interesantes que no se les había ocurrido siquiera.
No nos olvidemos que no sólo hay personas que necesitan vivir en un pueblo, es que hay muchos pueblos que necesitan que vayan muchas personas a vivir en ellos. Sin duda esta nueva migración hacia lo rural es una gran oportunidad para los pueblos, para la repoblación de algunas zonas, para que se vuelvan a recuperar servicios o para que se implanten servicios nuevos, en el fondo hablamos de desarrollo, de empleo y de oportunidades, justo lo que a muchos los sacó del campo hace muchas décadas para encerrarlos en la ciudad.
Ojo que no se trata de volver a vivir como se vivía hace cien años en el entorno rural, es más bien recuperar una forma de vida más consciente, con mejor calidad de vida pero sin renunciar a los avances de estos años que nos han hecho la vida algo más fácil a todos en general.
Volver al pueblo y desconectar
Ese es otro de los motivos que han animado a muchas personas a decidir que este era el momento de volver al pueblo.
Trabajar en remoto no siempre significa trabajar menos horas, demasiadas veces supone que no se desconecta nunca del trabajo, lo que nos puede llevar a sentir unos bloqueos mentales desconocidos hasta ahora.
Trabajar en remoto implica trabajar sin los compañeros habituales y sin los desplazamientos habituales, no sólo de la casa al trabajo sino en el propio trabajo.
Los psicólogos recomiendan que se anoten en la agenda tres actividades que nos gusten para hacerlas casa semana y cumplir con esa agenda porque es una manera de recuperar un poco esa sensación de control que nos ha abandonado al dejar de trabajar en modo presencial.
También es recomendable organizar “cafés colectivos” como los que podíamos hacer en el trabajo pero ahora de forma virtual, es una manera de seguir manteniendo el contacto social con los compañeros, una forma de compartir experiencias y poner ideas en común que pueden aliviar la sensación de soledad.
¿Por qué no hacer todo eso en un entorno más amable que nos permita respirar aire limpio y que nos deje más tiempo para sentirnos tranquilos con nosotros mismos? Quizás sí que es cierto que es el momento de volver al pueblo para quedarnos.