Equipo MMM No pasa nada, no todo se nos puede dar bien ni siquiera a nosotras.
Nos movemos, hacemos algo de deporte a veces, somos chicas sanas que nos cuidamos y eso está bien pero claro, de ahí a tener que practicarlos todos y encima hacerlo bien y que nos guste pues va a ser que no. Así que hoy toca confesar que hay deportes que no nos vais a ver practicar nunca jamás porque esos, precisamente esos, no están pensados para nosotras ¡qué tristeza más grande!
Running (Sara)
Running. Jogging. Correr. Me da envidia la gente que corre porque generalmente son unos motivados de la vida ¡y la gente entusiasta siempre está bien! … pero para mí correr es sencillamente una tortura china. No corro ni a por el autobús y no tengo nada de fondo. Me aburre SOBERANAMENTE. Lo peor de todo es que el convencimiento de que el running no me gustaba casi acaba con mis ganas de hacer deporte. ¡Parecía que fuera el único deporte del mundo! Afortunadamente llego el zumba a mi vida primero y después del fitness ¡y estoy encantada!
Tenis (Pilar)
No es que le ponga atención porque me aburre soberanamente (ya está, ya lo he dicho) y claro al no ponerle atención pues tampoco me entero de los gritos que pega ese señor subido a esa silla.
Además, en las escasas ocasiones que he cogido voluntariamente una raqueta tampoco he conseguido que esta golpeara a esa pequeña pelota que se mueve a esa velocidad endiablada así que es frustrante y aburrido para mí por lo que no, el tenis no es lo mío ni ahora ni nunca. Otro día si eso hablamos de los tenistas es que no es lo mismo, no sé si me explico.
Bodycombat (Sonia Urban&Mom)
Por muy de moda que esté este mix entre artes marciales, boxeo y baile no es para mi. Tiene todos los ingredientes necesarios para hacerme fracasar. Véase: soy cero en coordinación, tengo menos fuerza que el canario de mi vecina y mi sentido del ridículo me impide ponerme esa ropa tan ajustada. Total, que me quedaré con las abuelitas haciendo aerobic de bajo impacto y yoga para acartonados.
El Pilates (María Jardón)
No soy la persona más deportista del mundo ni mucho menos pero sí me gusta hacer deporte y he probado muchos y muy variados. Voley, tenis, balonmano, equitación, baloncesto, padel, natación, patinaje… a todos les he cogido el gusto pero si hay uno con el que no puedo es con el Pilates. Me parece dificilísimo eso de estar controlando la respiración constantemente. Pero lo peor, no es no poder seguir el ritmo, lo peor es ver como todas las señoras (entre las que se encuentra tu madre) son capaces de hacer todos los ejercicios a la perfección y a ti se te salen los higadillos por la boca.
Deportes de deslizamiento (María L. Fernández)
Yo soy de las que piensa que en el deporte, como todo en la vida, es necesario un mínimo de pericia y un alto grado de voluntad. Con ello es suficiente para no desentonar. No digo para que se te de bien, pero sí al menos para no parecer absolutamente ridícula. Y como a mí voluntad me sobra, no me duelen prendas en reconocer que metida en el ajo, mejor o peor, puedo mantener el tipo en casi cualquier contexto deportivo SALVO (siempre hay un salvo) en los “deportes de deslizamiento”. Ya os puedo decir que patinaje y surf -que son los que he probado- están vetados y vedados para mí y deduzco que lo mismo sucedería si hablamos de esquí, snowboard o cosas por el estilo.
