No recuerdo si cuando era pequeña me obligaba a dar besos a diestro y siniestro. Sólo se que cuando fuí creciendo y llegue a la adolescencia, los besos llegaron a mí por centenas. Y me gustaba el tema, oye.
Daba igual si te habías visto con tu amiga de turno toda la mañana del viernes en el instituto (seguro que al llegar os habíais besado) porque cuando llegaban las 8 y quedábamos para salir a dar una vuelta en el BBVA (sí, ese banco de esa esquina donde siguen quedando todos los adolescentes y jóvenes de mi ciudad), te plantabas dos besos con todo el mundo. Con todos, no exception.
Y Collado arriba Collado abajo (es la calle por la que se pasean los sorianos), cada vez que encontraba a una amiga, amigo, conocida o conocido, daba igual las horas que hubieran pasado desde el último encuentro: allí que acercábamos mejillas, cachete con cachete, y dos besos, con sonido y todo
Tampoco recuerdo en que momento aquello dejo de gustarme. Pero me dí cuenta de que no tenía sentido besar a gente que había visto hacía un rato. Quizá en la universidad, ya no me gustaba eso de que todo el mundo te besara el lunes como si desde el viernes hubieran pasado 4 meses.
Cuando empecé a trabajar, el tema de los besos perdió todo sentido. ¿Besar a un cliente? ¿Besar a un alcalde o a un político que no conoces de nada? ¿Besar al comercial de turno? ¿Besar a un usuario del servicio? Pero buenooooooo: FIN DE LOS BESOS.
Por ahí no paso. Desde hace muchos años solo beso a mis compañeras en contadas ocasiones (un nacimiento, la vuelta desde una baja o licencia prolongada…algún cumpleaños…). No besos a políticos, ni a comerciales, ni a usuarios. Les doy la mano. Y a veces (más de las que yo quisiera) tiran de ella para acercarte y darte los consabidos dos besos. ¡¡¡Agggggg!!! ¡¡Pero por dios, que los besos contagian de todo!! Ese cachete con cachete está plagado de virus, de grasa, de microbacterias que hay en la piel… Que no, que no. Que no me vais a convencer de dar besos a diestro y siniestro.
Y además, le encuentro un punto machista al asunto de besar a una mujer y a un hombre darle la mano. ¿Desde cuando? En el ámbito profesional, se da la mano y punto. Por eso he relegado los besos a mi círculo más íntimo y los he clasificado en dos:
BESOS QUE DOY:
- A mis niñas, varios al día. Acompañados de achuchones, abrazos y cosquillas. Esos molan.
- A mi chico, siempre que me apetece y con diferentes niveles de pasión, según me venga, según la ocasión…
- A mi familia, cuando nos reencontramos cada 3 o 4 semanas (o más tiempo con abuelas, tías…)
- A mis amigas de siempre, a las que veo del ciento al viento y siempre echo de menos. También van con abrazo
BESOS QUE ME DAN, PERO SIN LOS CUALES PODRÍA VIVIR PERFECTAMENTE
- De mis conocidos, algunos que si pasan 3 días sin verte, te plantan dos besos
- De mi médico, que como me ve de pascuas a ramos, también suele besarme
- De los padres/madres de niños que son o fueron compañeros de mis hijas en la guarde o en el cole…no hay necesidad
- De gente a la que te presentan conocidos (que no amigos) en un ámbito laboral o profesional, la mano y ya está
- De mujeres con las que coincides en una reunión de trabajo y por el hecho de ser mujeres, piensan que dar la mano no mola y mejor dar dos besos (y venga base de maquillaje y polvos compactos de una cara a otra)
- De conocidos que organizan algún evento y te invitan y se ven en la obligación de besarte en agradecimiento por haber ido: mejor ponme un vino y me lo agradeces igualmente
- Del gestor del banco, que bien que la política de la entidad sea acercarse al ciudadano, pero como decían en Dirty Dancing “este es mi espacio, este es tu espacio”
- De la de la farmacia de confianza, otra que como no ve me el pelo, igual piensa que dándome dos besos, iré más a menudo (o es una estrategia de contagio masivo para vender más…¡aha!)
Y tú, ¿que opinas de los besos?
Odio dar besos porque si..sobre todo eso de que ves a gente varias veces por semana y te besan cada vez… Tengo amigos que ya me los dan solo por fastidiarme ajjajaja. Yo beso a mi hija, a mi pareja…y a gente a la que aprecio y que no veo mucho, pero sino eso de saludarte con dos besos me da mucha Pereza. Yo siempre lo he definido como ser de burbuja amplia, necesito.mucho espacio, q no me.invadan!!! En el trabajo tb doy mucho la mano y hay gente que mira raro esperando dos besos.
Jajajaa, te entiendo! Especialmente en verano es algo q no apetece nada. (Besar a un desconocido sudado?!). Yo doy la mano. Pero como soy guiri, nadie se extraña 😉