“Mami, ¿me ayudas?”, “Mami, ¿juegas conmigo?”, “Mami, ¿pintamos?” y mami, que parece una olla a presión, que acaba de llegar a casa tras ocho horas maratonianas en el trabajo, que tiene una montaña de ropa para planchar a la que no se le ve la cima, que no ha recogido aún las cosas del lavavajillas y que, por supuesto, todavía no sabe qué va a cocinar para mañana coge los plastidecor sin ganas y se deja llevar. Pone la mente en blanco y colorea. Colorea a La Sirenita, colorea a Caperucita, colorea a la Bella Durmiente y sigue con Dora, con Bob Esponja y con el anodino Calamardo. Y colorea y colorea hasta que, media hora después, “regresa” -su mente- a la tierra para encontrarse a sí misma sola en la cocina, con más de medio libro de colorear garabateado, todos los colores desplegados sobre la mesa y, sobre todo, una paz interior imposible de alcanzar ni con una buena dosis de Valeriana.
¿Cómo? ¿Era esta quizás la solución a todos los problemas? ¿A estas alturas me van a decir que en vez de terapeuta lo que una necesita para lidiar con el estrés es colorear -¡ni pintar hace falta!? ¿Insinúan a caso que una buena dosis cromática amilanará los demonios que me corroen en jornadas como esta? Pues ¡bueno! quizás no sea la SOLUCIÓN -con mayúsculas bien grandes- a todos los problemas, pero lo cierto es que colorear se está imponiendo como un buen método de relajación para los adultos. Y no voy a apelar aquí a tirar de base histórica trayendo a colación las mandalas e hinduismo, ni a ningún estudio sesudo para reafirmarlo -que si me pongo seguro que lo encuentro, ¡eh!-. No, hoy vamos a tirar de números para demostrar que colorear ya no es, ni mucho menos, solo una cosa de niños:
- El fenómeno arrancó en Francia en el 2012, pero no fue hasta este año cuando realmente se ha producido su auténtico boom.
- En el Reino Unido, cinco de cada diez libros más vendidos en Amazon son para colorear.
- En Estados Unidos, los libros para colorear han alcanzado el quinto lugar entre los más vendidos.
- En España, donde el fenómeno aún está “aterrizando”, ya aparecen entre los veinte primeros.
- Johanna Basford, es una escocesa de 31 años a la que se la puede considerar auténtica precursora de esta tendencia. Su primer libro de colorear para adultos, “El Jardín Secreto” se publicó en marzo de 2013 y en poco más de un año ya había vendidos 1,4 millones de copias y ha sido traducido a 14 idiomas.
- La segunda entrega, “El bosque encantado”, lanzado el pasado febrero, va por el mismo camino -más de 220.000 ejemplares vendidos en poco más de dos meses-.
- En Francia, en 2014, los libros de colorear para adultos sobrepasaron en venta a los de cocina.
¿Pero, dónde radica su éxito?
Probablemente en que son una actividad asequible en todos los sentidos. Ni requiere un gran desembolso ni es necesario ser un portento de las artes plásticas para disfrutar de ellos. Además, tampoco precisan de un gran despliegue de medios para iniciarse en esta actividad -unas láminas y algunos colores (aquí hay para todos los gustos: rotuladores, lápices de colores, ceras…) son suficientes- ni de demasiada constancia -unos minutos, aunque sea de forma discontinua, bastan-.
A cambio, nuestra pequeña regresión a la infancia promete reportarnos tranquilidad, fomentar nuestra creatividad, ahondar en nuestra relajación y liberarnos de tensiones. Un poco de silencio, algo de vino o quizás una infusión -en mi caso me apunto a una coca-cola- y prepárate para desconectar tu mente. Algo así como si nos tomásemos un kit-kat pero sin que se nos quede pegado a las cartucheras de por vida.
Las obras de Johanna Basford, comercializadas en España por MTM Editores, son, sin duda, una referencia a nivel mundial, pero ni mucho menos los únicos que podemos encontrar en el mercado. De hecho, la propia MTM Editores ya se había especializado a principios de los 2000 en libros de mandalas para adultos. Ahora, el fenómeno se ha convertido en lo que en lenguaje cibernético podríamos llamar como viral y tenemos libros para todos los gustos, tamaños y, ¡como no! bolsillos.
Plaza y Janés comercializa una colección de libros de Arte Anti Estrés con temática variada y un precio más que atractivo -poco más de diez euros-. Buceando por la red me he quedado prendada de este libro de inspiración japonesa y este de Arte Terapia, que incluye obras de diseñadores que son ya tendencia como Richard Merritt. A poco que escarbéis os encontraréis brillantes propuestas como las de Millie Marotta o la rompedora de Mel Elliott que traslada la propuesta al mundo pop. En este artículo, mi compañera Sara Palacios hace en su blog Mamis y Bebés un repaso imprescindible de algunos de los mejores títulos si quieres adentrarte en este mundo.
Pintar en un buen libro, en inmaculadas hojas de papel satinado es un auténtico placer pero en la red encontramos un millón de propuesta para descargar de forma gratuita. Yo soy muy fan de las chicas de Cosas Molonas, que tienen un gusto exquisito a la hora de recopila propuestas de lo más atractivas y originales, así que aquí tenéis 18 láminas imprescindibles. Merece la pena adquirir alguna de las obras de Almu de Arte pero, en cualquier caso, ella nos ofrece varias muestras gratuitas. Y, aquí, un extra cortesía de esa fábrica de procrastinación que es Pinterest.
Me encantan. Yo lo descubrí hace poco y me compré uno de Verónica maraver. (creo que se llama así). Poco tiempo tengo y me relaja. Me encanta que vendan estas cosas para las torpes que no sabemos dibujar.
Yo empecé con los mándalas del Tiger.. Pero ahora le doy al crochet.. Aunque vistas las propuestas tan chulas que has encontrado, creo que retomaremos costumbres. Eres una coolhunter!!
Pues a mi me encanta hacer esto o hacer mis propios garabatos. Me quedo tranquila y sosegada, sin pensar en nada. Pero no sabía que esto se vendía para adultos para fomentar una terapia y la tranquilidad. Me alegro por ello!
Saludos