Maria Jardón Seamos realistas, año tras año nos hacemos unos propósitos en fin de año y son pocos los que conseguimos llevar a cabo. Solemos empezar con mucha energía y fuerza de voluntad a cuidarnos, organizarnos mejor, hacer más deporte… pero poco a poco nos vamos desinflando. Por eso, hoy quiero darte unos consejos para conseguir tus propósitos de año nuevo definitivamente.
Es algo muy complicado porque algunos requieren un cambio radical en la forma de pensar, o en nuestro día a día, pero te aseguro que si lo consigues te sentirás genial contigo mismo. Recuerdo el año que conseguí dejar de fumar, me lo propuse en fin de año como había hecho otros 5 años antes, pero algo cambio en mi cabeza y definitivamente lo conseguí.
Si eres de los que el 31 de diciembre te has hecho unos propósito de cara a este año, continúa leyendo, este post te interesa.
Déjalos por escrito
Esto es lo primero que debemos tener en cuenta. Está muy bien pensar en lo que nos queremos proponer de cara a este año pero, tenemos que verlo por escrito, y lo que es más importante, releerlos a menudo para interiorizarlos totalmente.
Divide tu propósito en pequeñas acciones fáciles de hacer
Lo importante para conseguir un propósito es poder trabajar cada día en él y poco a poco, acercarte a conseguirlo. Si lo vemos como una meta muy lejana, casi como un sueño, es muy complicado lograrlo.
Por ejemplo, si quieres comer más sano proponte comer siempre una porción de verdura en la cena o en la comida y hacer una receta nueva sana a la semana, seguramente descubras nuevas recetas que te encanten y puedas incluir en tu menú habitual, sin darte cuenta, tu alimentación irá siendo mucho más saludable.
No te pongas demasiados propósitos
Normalmente solía ponerme 10 propósitos, pero al final tenía demasiados frentes abiertos y así es difícil centrarse en qué metas conseguir.
Lo recomendable es ponerte entre 1 y 4 propósitos para poder concentrar todas tus energías y tener el foco puesto en conseguirlo. Sin dispersarte. Es mucho más fácil tener éxito si todos tus esfuerzos están canalizados en una misma dirección que si cada día tienes que pensar en varias acciones que hacer.
Define algo que te recuerde tu propósito cada día
Asocia algo que hagas a diario con tu propósito, de tal manera que cada vez que lo hagas te acuerdes de tu meta. Puede ser una alarma en el móvil, ponerte las zapatillas por la mañana o el café de después de comer, así, ningún día te olvidarás de poner tu pequeño grano de arena diario para alcanzar tu objetivo.
Premiate por cada logro
No es necesario esperar para conseguir tu propósito, celebra cada pequeño logro que consigas, te hará sentir mejor y servirá de estímulo para continuar luchando por alcanzar tu objetivo.
Busca algún sustituto
Al menos al principio, lo que te puede ayudar es buscar algo que sustituya lo que quieras cambiar. Por ejemplo, si quieres adelgazar puedes beber un vaso de agua cada vez que vayas a picar algo; si tu propósito es dejar de fumar puedes buscar algo que te ayude a olvidarte en ese momento, hay quien lo cambia por comer chicles o, en mi caso, como el cigarrillo que más me costó dejar fue el del café de después de comer, lo sustituí por una barrita de kit-kat; o si lo que te pasa es que tienes un vicio con la Coca Cola y quieres dejarla, puedes cambiarla por un té…
Eso sí, te recomiendo que el sustituto lo utilices al principio y el mínimo tiempo posible, porque, si no, va a ser cambiar un vicio por otro.
Espero que estos consejos te sean de ayuda, yo por lo menos estoy convencida de que conseguiré los que me he propuesto este año, pero no quiero terminar este post sin daros un último consejo: “si fallas, vuelve a intentarlo”. El camino para conseguir tener éxito no es fácil, si lo fuera, lo habrías hecho antes, así que intentarlo una y otra vez, si estás convencida de que quieres hacer ese cambio, lo conseguirás.
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