Sara Palacios Había oído hablar del veterano programa de televisión RuPaul Drag Race porque tengo amigos (gays) que lo veían. Que no se emita un programa en España no siempre es un problema para mí: me las he arreglado para seguir casi al día Project Runway y America’s next top model, programas que sigo con fervor auténtico, pero RuPaul Drag Race no era algo que me atrajera especialmente. Hasta que ¡claro! Netflix me lo ha puesto en bandeja y las pasadas navidades nos tragamos prácticamente todos los episodios que había disponibles. 5 temporadas, un especial y un All-Stars que están colgando a la vez que se emite en EE.UU. Ahí es nada.
Y digo bien: NOS hemos tragado porque lo hemos visto en comandita las tres, para horror de mi esposo que no entendía cómo nos podía gustar tanto eso tan raro que estábamos viendo. Aún a riesgo de que me quiten la custodia de mis hijas no considero que un reality de drag queens malhabladas sea lo peor que pueden ver y al fin y al cabo ellas están bastante curadas de espanto. A la pequeña de 9 le hace gracia pero sin más, pero la mayor de 12 es tan fan como lo soy yo.
RuPaul´s Drag Race, pura fantasía
RuPaul Drag Race es un reality show que tiene 10 temporadas regulares completas a la mayor gloria de RuPaul Charles, creador, presentador y alma del programa. En él compiten un grupo de drag queens para conseguir ser la mejor de América. Parece un reality show normal, pero claro, ya el planteamiento es de por sí un tanto bizarro. Drag Queens. Poniéndose a parir entre ellas. Excesivas. Unas pruebas rarísimas.
Y RuPaul, que básicamente escucha a todo el mundo pero hace lo que le sale de las narices. Él es quien nomina, quien expulsa y quien elige una ganadora. Consultando, sí, pero la última palabra es suya. A mí esta falta de democracia no me acaba de convencer, sobre todo porque al final lo que prima es su criterio y puede coincidir o no con el gusto de la mayoría. Yo hay temporadas que he puesto los ojos en blanco y he exclamado ¡¿en serio?! al conocer la ganadora. Pero mira, él se lo guisa, el se lo come se hace famoso de verdad y él se hace rico con el programa. Todo bien.
El programa se estructura en cuatro partes. La primera en un mini challenge (antes que nada, aprovecho para pediros vivamente que lo veáis en Versión Original y no por una cuestión de esnobismo, es que los amaneramientos fingidos de la traducción son matadores). Es una prueba rápida generalmente con bastante poco tiempo de preparación que acaba resultando con uno o dos ganadores que tendrán una ventaja para la siguiente prueba. Así como en otros concursos las minipruebas suelen traer ventajas mierderas poco ventajosas aquí es más que recomendable esforzarse para ganar. Muchas veces es quien hace los equipos para la siguiente prueba eligiendo no sólo su pareja sino la de todo el mundo.
La segunda prueba suele ser determinante y es imprescindible hacerlo bien y se centran en distintos aspectos que suelen tener que trabajar las drag queens. La idea del concurso es que gane la drag más completa así que lo mismo tienen que interpretar, que hacer humor, imitaciones, cantar o coser y diseñar un traje para la pasarela. Algunas pruebas ocurren en todas las temporadas, como el famoso snatch game que es un concurso inventado en el que las drags tienen que acertar las respuestas de un par de famosos invitados. El problema es que todos están imitando a distintos personajes y al final es una auténtica locura
Si os soy sincera, muchas de las veces no conozco a los que imitan, pero da un poco igual porque suele resultar muy divertido. Esta es probablemente la prueba favorita de los fans. Otros de los maxichallenges pueden ser crear un videoclip de una linea aérea inventada de drags, recrear una telenovela, hacer un musical de las Kardashians o un talk show. Todos muy locos, con juegos de palabras en los títulos y que se prestan a la broma.
Category is….
Después van a plató para el veredicto y las drags salen vestidas con una temática prefijada y anunciada por RuPaul con el característico “Category is…”. Algunas de las que se han realizado han sido Madonna (repetida en la siguiente temporada porque lo hicieron fatal y todas llevaron un kimono), blanco y negro, plumas o el último baile en la Tierra. Y que se busquen la vida. Tras el desfile RuPaul anuncia las tres que están en lo más alto y en lo más bajo de la clasificación y se pasa a las críticas de los jueces.
En las temporadas de la 6 a la 10, que son los disponibles en Netflix, suele haber unos jueces más o menos fijos y otros invitados. Michelle Visage, Carson Kressley y Ross Matthews son los habituales (Santino Rice en la 6ª) y entre los invitados la flor y nata del mundo del arte. Por el programa de RuPaul pasa lo mejorcito del cine, de la televisión, los cantantes más conocidos, humoristas… de todo. Es impresionante el nivelazo de los invitados, que van encantados a un programa donde reina el jolgorio y la risa constante. ¡Y no se cortan ni un pelo! Mucho jijí y jajá pero los critican sin piedad alguna.
La ganadora del día recibe un premio y las dos que han perdido tienen que batirse en el duelo más bizarro del mundo, lip sync for your life, que consiste en que las dos comienzan a hacer el playback de una canción que saben con antelación (¿?). Si hay algún cantante como jurado invitado suelen usar alguna de sus canciones como deferencia.
Lo del lip sync (que es como se llama al playback en inglés… así que yo me pregunto de dónde narices habremos sacado lo de playback nosotros) es una fantasía y se vuelven loquísimas porque lo viven muchísimo. Cuando termina RuPaul anuncia “Fulanita, shante you stay. Menganita, sashay away”, o lo que es lo mismo, que una se va y la otra se queda. Y la que se va, se va. Normalmente suele decir algo y se va de una manera más o menos memorable a dejar escrita una frase con pintalabios en el espejo que borrará la que se queda en el capítulo siguiente.
Y luego está Miss Vanjie, una concursante de la temporada 10 que se fue con tanto ¿estilo? que se pasaron toda la temporada haciendo bromas al respecto. El mismo RuPaul se estuvo riendo un montón de tiempo del Miss Vaaaaaanjie de la concursante y fue motivo de mil y un memes.
¿Qué he aprendido viendo RuPaul’s drag race en bucle?
La verdad es que cuando comencé a verlo me costó decidir si me estaba encantando lo que estaba viendo o por el contrario lo odiaba. No fue un programa que me entrara de primeras porque ¡narices, qué extraño era todo!. Sin embargo, a fuerza de verlo RuPaul’s Drag Race me ha conseguido ganar.
Desconocía yo totalmente el mundo de las drags. Para mí es interesante aproximarse a algo totalmente desconocido para mí. Con mi heteronormativismo desconocía (sorry) qué son DE VERDAD las drags ¿son chicos, son chicas? ¿Son trans? Creo tener la respuesta. La mayoría de las drags son hombres gays que crean un personaje femenino para la escena. Cuando termina la función, ellos se visten de chicos otra vez. Existen algunas trans (hombres que se sienten mujeres, con o sin reasignación de género) que también hacen drag… o incluso que a través del drag se dieron cuenta de que ERAN mujeres. No es lo habitual esto último.
Yo no sabía hasta qué punto eran un personaje. En el caso de la mayoría, es un personaje y no tiene necesariamente la misma personalidad que ellos. Escogen si es extravagante, si es abierta, si le gusta llamar la atención y lo exageran mucho. El mundo drag es el mundo del exceso, en todos los sentidos.
A mí algunas drags lo reconozco, no me caen bien, y es por esto que a veces me extraña que RuPaul las haya escogido como ganadoras. Se supone que una drag TIENE que caer bien, o al menos eso es lo que él dice. Algunas de las ganadoras no me parecían lo suficientemente carismáticas. Otras tenían la lengua viperina, pero a pesar de meterse con todo lo que se mueve resultaban graciosas de verdad.
Esa es otra: hay distintos tipos de drags. Están las cómicas, las de pasarela, las cantantes, las bailarinas…
Viendo RuPaul he aprendido a abrazar la diversidad, a ver el trabajo que lleva, las inseguridades (muchas, cantidad de ellas, toneladas) que arrastran, los episodios de acoso, la incomprensión de las familias y las dificultades a las que tienen que enfrentarse cada día. Y las respeto.
Ahora ya manejo con soltura terminología como “conDRAGulations”, sé que es un “death drop” y si me apuras hasta podría explicar cómo se esconden los genitales (lo que se conoce como tucking) para crear la ilusión de que son mujeres (esto último gracias a Trinity the tuck en el All Stars).
Me encanta RuPaul´s drag race y os lo recomiendo porque ensanchará vuestra mente. Merece la pena verlo y tal vez quedéis enganchados en sus redes como nosotras.
