Parafilias: hablamos de fetichismo sexual y otras cuestiones

En el sexo, mientras sea consentido, vale todo. Todos tenemos claro (o deberíamos) que NO es NO y que el consentimiento puede revocarse en cualquier momento, pero más allá de eso no existen muchas reglas. Una de las cosas que más suele llamar la atención son las parafilias que, como dice la wikipedia son “patrones del comportamiento sexual de las personas, en las que la fuente predominante del placer sexual no se encuentra en la relación sexual como tal, sino en alguna otra actividad u objeto. Las definiciones más usuales recogen comportamientos como la coprofilia, el exhibicionismo, el frotismo, el masoquismo, la necrofilia, el sadismo, el voyeurismo y la zoofilia.”

fetichismo. Parafilias

Personalmente, para mí la parte del consentimiento es la fundamental: si a ti te pone, yo qué sé, que te hagan pis encima y tu pareja está de acuerdo, mira, adelante. No seré yo la que tenga absolutamente nada que objetar aunque no lo comparta. Pero para mí necrofilia, zoofilia, pedofilia (ésta ESPECIALMENTE, me parece algo deleznable) no son aceptables por la sencilla razón de que el consentimiento no existe ni puede existir.

En la película de Paco León estrenada en 2016 Kiki el amor se hace se exploraban precisamente algunas de las formas de obtener placer que pueden clasificarse como parafilias (entre ellas la dacrifilia, elifilia, somnofilia y harpaxofilia). A mí me intrigaba la película, pero he de reconocer que me parecía más interesante la IDEA de la película que el film en sí.

Kiki el amor se hace
Foto: momento del rodaje de Kiki el amor se hace

Algunas de las parafilias y fetichismos sexuales más curiosos

  • Parcialismo: Es la atracción hacia una parte del cuerpo no genital. Puede ser en general o solo en determinadas situaciones. Por ejemplo hay a quien le excita muchísimo ver un pie enfundado en un tacón de aguja pisando el acelerador de un coche.
  • Retifismo: Fijación por los zapatos. Esta es la parafilia concreta referida a los zapatos.
  • Infantilismo parafílico: No recuerdo en qué película fue pero recuerdo quedarme picuetísima cuando descubrí que había gente a la que le ponía ponerse pañales ellos y actuar como si fueran bebés. Por lo que parece es más común entre hombres que mujeres.
    diaper dance
  • Hibristofilia: Enamorarse de criminales, incluso los que están condenados por crímenes horribles. Existen distintos grados y es más común entre mujeres. Las hay por ejemplo que se colaron desde la distancia por Jeremy Meeks, el preso más guapo del mundo, pero otras llevan su hibristofilia más allá e incluso han llegado a casarse con ellos. Otra versión leve es la de enamorarse de malotes, aún sabiendo que pueden hacerte daño.
  • Agalmatofilia: La sufren personas que sienten atracción sexual o sentimental por muñecas o incluso estatuas.
  • Claustrofilia: Es justo lo contrario a la claustrofobia. Hay a quien le excita tener sexo en lugares tremendamente pequeños… y es una fijación bastante común de hecho. Los baños suelen ser unos de sus lugares favoritos.
sexo en el baño
El baño puede ser más pequeño y estar más cochino
  • Odaxelgania: Es la excitación con los mordiscos. Algunos se excitan cuando se los dan y otros dándolos. Está considerada una versión light del sadismo ¡cuidado con la fuerza con la que muerdes!
  • Hematofilia o hematolagnia: Tantas series de vampiros han hecho que esta filia gane en popularidad. Consiste en utilizar de diversos modos o incluso en algunos casos ingerir sangre durante el sexo. También algunos tienen pensamientos eróticos sobre la sangre y se ponen cachondos sólo de imaginarla.
  • Ursusagalamatofilia: Hay a quien le pone vestirse de animalitos de peluche. En Estados Unidos parece ser que es bastante común (lo furry triunfa) y en Japón también, de hecho hay un tipo de anime basado en esta filia.
Hay gente pa to
  • Acrotomofilia: Hay a quienes les ponen las amputaciones o aparatos ortopédicos. No se trata de amar a una persona con ellas sino de excitarse con la amputación en sí. Devotees son los que oscilan entre admiración y deseo sexual y wannabes son los que envidian las lesiones ajenas.
  • Salirofilia: Es muy común que la gente quiera estar limpia antes de tener relaciones sexuales. Sin embargo hay quienes prefieren todo lo contrario: les encanta ensuciarse o ensuciar a su pareja durante el sexo. Puede involucrar hacer que se corra el maquillaje, romper ropa o despeinar.
  • Coprofilia: Es la excitación por las heces. Quienes la practican pueden disfrutar haciendo caca encima de sus parejas o al contrario.
Marlon Brando sucio
La roña épica es otra cosa
  • Dacryfilia o dacrilagnia: Hay personas a quienes llorar o hacer llorar a su pareja les excita. Mientras la pareja esté de acuerdo…
  • Somnofilia: Excitación por las personas dormidas. Es el fetiche de la Bella Durmiente y no tenemos nada que objetar siempre y cuando exista un consentimiento previo y se haya hablado de ello con anterioridad. Hacerlo sin esto es violación, lisa y llanamente.
  • Mecanofilia: A este grupo le excitan las cosas mecánicas, las máquinas y los gadgets de todo tipo. Así, los utilizan como centro de la experiencia sexual
inspector gadget
Así que yo soy mecanofílico, ¿eh?
  • Autoandrofilia: Es propia tanto de lesbianas o bisexuales como de heterosexuales. Consiste en excitarse al vestirse de hombre o imaginarse que es uno durante el acto sexual o sus preliminales.
  • Formicofilia: para algunos los insectos, lejos de darles asco, pueden excitarle. Se puede obtener placer sexual a través de insectos caminando por el cuerpo. Sí. Lo que lees.
  • Hierofilia: Sentir excitación por los objetos religiosos.
madonna like a prayer
Que se lo digan a Madonna

¿Has descubierto alguna parafilia que desconocías? ¿Cuáles son las parafilias que más te cuesta comprender? Si tienes interés por conocer las parafilias que relacionan comida y sexo te recomendamos que te pases por este artículo de Spices Cave de lo más sugerente.

Sara Palacios

Soy Sara Palacios, aunque en la red muchos me conocen como Walewska, mi nombre de guerra. Soy curiosa, inquieta, seriéfila, gafapastas y a ratos pedante. Los que me conocen dicen que tengo mucho sentido del humor y yo no sé si soy graciosa o no, pero que me gusta reírme continuamente es un hecho. ¡Soy una optimista incorregible!

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