Las vacaciones en septiembre son una opción más que válida y si lo piensas bien, hasta mejor para disfrutar de un tiempo para ti. Y es que, si has elegido las vacaciones esa fecha es porque ya sabes que tengo razón e irás asintiendo mientras leas este post. Si es la primera vez, ya verás como al final me das la razón y si no, tiempo al tiempo.
Voy a contarte las razones por las que coger vacaciones en septiembre no es tan mala idea, e incluso mola mucho.
En primer lugar, agosto suele ser un mes con poco trabajo, por lo que si te quedas en la oficina, irás a sacar el poco trabajo que suele haber, a poner al día expedientes y a archivar.
Por otro lado, durante los meses de julio y agosto, se suele hacer jornada intensiva en una gran mayoría de empresas, por lo que harás de 8:00 a 15:00 y tienes toda la tarde para disfrutar de la ciudad en verano.
Otra razón de peso, es que en septiembre y eso sí, antes de que empiecen los coles, las playas o lugares turísticos empiezan a estar desiertas: encuentras mesa en la mayoría de los restaurantes, puedes elegir el que tú quieres y no acabar cenando en el que nadie quiere, no tienes que hacer cola en la playa para coger sitio a la orilla del mar. ¿Os parecen razones de entidad o no para escoger las vacaciones en septiembre?
Si por otro lado, decides coger un avión o reservar un viaje, siempre será mucho más barato que en pleno mes de agosto.
Si eres madre/padre, como la mayoría de lectores de nuestro magazine, pensarás que estoy loca, que coger vacaciones en septiembre es horrible, pero dale una vuelta a la propuesta: durante el mes de julio llevaste a los niños a un “summer camp”, campamento o como quieras llamarlo. En agosto, has tirado mano de abuelos de ambos lados, y con suerte, has estado de Rodríguez en la ciudad, que es una opción más que buena. Y ahora en septiembre… tienes 10 días para disfrutar con la familia a tope, y cuando crees que ya no puedes más, y como si de un período de adaptación se tratara… los niños vuelven al cole, sólo mediodía.
Ahora es cuando, tienes que aprovechar el tiempo y dejar a los niños en el comedor. Haciendo una treta de malamadre de manual, tendrás toda la mañana para tí. Dejas a los niños en el cole a las 9 y hasta las 15:00 horas se abre un mundo para toda madre con ganas de hacer planes de mujer ” a secas”: ir a las rebajas, a desayunar a un local de moda, tomar un aperitivo a media mañana, tomar café al dejar a los niños en el cole con el resto de madres, que muchas veces viene bien para confraternizar.
Y por la tarde, te ahorras el problema de qué haces con los niños durante las tardes. Como estás de vacaciones, puedes hacer planes diferentes para que los peques, que aún no tienen deberes ni agobios de extraescolares, también disfruten de esos momentos: hacer un picnic en el parque, pasar la tarde en un centro comercial fresquito. No ir al cole el viernes y alargar el fin de semana hasta el infinito.
Una de las cosas que más me gustó de las vacaciones, fue llevar a las niñas al cole el primer día. En nuestro cole, primaria empezaba a una hora e infantil a otra, por lo que con la tontería eran varias horas de retraso, así que con total tranquilidad, y sin la ansiedad de tener que dejarlas corriendo, disfrutamos de ese primer día.
¿Se os ocurre mejor plan que disfrutar de las vacaciones en septiembre?
Imágenes: Shutterstock; 2, 3; propias