Tu hijo te vio practicando sexo ¿cómo vas a abordar el tema?

Te han pillado, os han pillado por sorpresa “lavando la ropa”, como decía una conocida hace tiempo. Para ser más claros, tu hijo o hija abrió la puerta y vio que sus padres estaban manteniendo relaciones sexuales, tu hijo te vio practicando sexo y la cuestión es ¿qué vas a hacer ahora?¿un denso silencio, lo que no se habla no ha existido nunca?¿una explicación larga sobre las semillas y las flores?¿cogemos el tema a pecho descubierto y nos liamos con explicaciones sesudas y científicas?

Para la psicóloga, sexóloga y terapeuta de pareja, Elena Crespi, este es un tema sobre el que le preguntan muchas parejas en su consulta precisamente buscando orientación porque reconocen que no saben qué hacer en ese momento, “lo primero que deben tener claro, sin embargo, es que no hay una respuesta única sobre qué hacer” después de que tu hijo te vio practicando sexo, que no sé si es una respuesta que les relaje mucho pero desde luego, les abre la puerta a distintas posibilidades para abordar el asunto.

Lo primero, no perder la calma ni los nervios, no gritar ni enfadarse ni regañar al niño cuando cruza la puerta. Clic para tuitear

La naturalidad es tu mejor baza

Pero claro, para tratar “la pillada” con naturalidad, primero habéis tenido que hablar de sexo y sexualidad con tus hijos con la misma naturalidad, desde que son pequeños y con aspectos acordes con su edad y su madurez.

Lo que no se recomienda tras el momento embarazoso que habéis vivido porque tu hijo te vio practicando sexo, es ni el silencio ni gritar al niño o a la niña como si tuviera ningún átomo de culpa. Aquí no hay culpables de nada. Si el crío abrió la puerta lo mismo es que algún adulto se olvidó de cerrarla bien así que no, culpables ninguno.

Ignorar el acontecimiento tampoco es lo mejor para educar a los niños porque, esto lo que va a provocar es “que los niños perciban los temas sexuales como algo misterioso, oscuro o malo porque sus padres se enfurecieron o se avergonzaron, según señala Nereyda Lacera, médico sexóloga.

Incluso aunque en tu familia nunca hayáis tratado el tema de la sexualidad nunca, no es conveniente ignorar ni silenciar lo ocurrido.

Respuestas más que explicaciones

Y por supuesto siempre acorde a la edad del niño, no es lo mismo lo que espera entender si tiene 7 años que si ya ha cumplido los 13, por ejemplo. Con los niños es casi mejor preguntar si son ellos los que quieren que les expliquemos algo o si nos quieren hacer alguna pregunta sobre el momento.

Algo así como hablamos del tema, respondemos todas las dudas que tenga el niño o la niña, lo comentamos con tranquilidad y seguimos con el día a día tranquilo y habitual, y de momento nos olvidamos de que tu hijo te vio practicando sexo, con el paso del tiempo seguro que se convierte en una anécdota divertida a sumar a las que vayan produciéndose a lo largo de los años.

El psicólogo y sexólogo clínico Óscar David Díaz-Sotelo, señala lo importante que es en una familia poder “dialogar abiertamente sobre el conocimiento del cuerpo” porque esto contribuye a “eliminar los tabúes y abordar la sexualidad como un proceso natural” sin ningún tipo de connotación negativa relacionada con la moral o la religión. No hay mucho más allá del sencillo hecho de que tu hijo te vio practicando sexo, si lo piensas, es evidente que no es para tanto.

Tu hijo te vio practicando sexo: manual de instrucciones

Lo primero, no perder la calma ni los nervios, no gritar ni enfadarse ni regañar al niño cuando cruza la puerta.
Vestirnos y buscar el momento para hablar tranquilos sobre el tema, primero dejando que sea él o ella quien pregunte sobre lo que ha visto o ha creído ver.
Explicarle lo ocurrido teniendo muy en cuenta su edad y su madurez para hacernos entender sin generar mayor conflicto que el que ha arrancado con todo esto.
Responder a todas sus preguntas con tacto y con sinceridad, sin engaños ni ocultaciones, más allá de los límites que encontremos en su edad y su madurez.