Buenos hábitos japoneses que podemos aprender para ser un poco más felices cada día

Porque en el fondo la cultura nipona nos llama mucho la atención, despierta nuestra curiosidad, nos atrae a veces por su exotismo y otras por su eficacia. El caso es que hay toda una serie hábitos japoneses, que tienen interiorizados, que son muy sencillos por lo que los podemos aprender, copiar e implementar en nuestro día a día porque es evidente que a ellos les funciona así que ¿por qué no nos iban a funcionar a nosotras?

Japón está prácticamente siempre entre los países con mayor y mejor esperanza y calidad de vida del mundo, según los datos de The World Bank y quizás eso tenga relación con su forma de entender la vida y enfocar sus intereses y sus energías a través de sencillos hábitos que aprenden desde niños y que implementan de forma natural en su día a día.

Cinco hábitos japoneses que podemos probar en casa

Ikigai

Es sin duda uno de los hábitos japoneses más importantes de la cultura nipona. Lo traducimos como algo equivalente a “la razón de vivir” o “el propósito de ser que tiene una persona en el mundo”.

Es verdad que en Japón tienen muy interiorizado todo lo que tiene que ver con el espíritu, los sentimientos y las sensaciones, algo en lo que a lo mejor en occidente nos quedamos un poco cortos, así en general.

El Ikigai es la búsqueda del sentido espiritual de la vida, el propósito que nos mueve a continuar, la razón que hace que merezca la pena madrugar cada mañana.

Pararse a buscar nuestro Ikigai cuando sea necesario, meditar si queremos cambiarlo porque lo hayamos conseguido, son gestos que nos hacen encontrar un propósito, un sentido y una meta. Son hábitos japoneses que nos hacen valorar lo que tenemos, lo que somos y hacia donde nos queremos dirigir.

Shokuiku

Este concepto va más relacionado con la alimentación, con la comida, con el cuerpo y su salud. Es algo más físico pero que se basa fundamentalmente en la fuerza de nuestra mente y de nuestras decisiones. Para algunos este hábito es justo el secreto de la población de Japón para vivir más y mejor y es algo que se aprende desde la infancia, de hecho se enseña en las escuelas infantiles de todo el país. Con ello también han conseguido que los niños japoneses sean los más sanos del mundo en términos generales.

Shokuiki es la suma de dos palabras japonesas, por un lado “comer” y por el otro “crecer” y se plantea a partir de unas reflexiones y comportamientos que se enseñan a los niños para que les acompañen durante toda su vida.

  • Hay que hablar con los niños de la comida, qué es lo que hay en el plato, qué beneficios tiene cada alimento en su salud; esta es la forma en la que se enseña a los niños a mantener hábitos saludables de alimentación durante toda su vida.
  • Cuando crecen, ellos son también los responsables de elegir y comprar alimentos saludables pero también de cocinarlos. En Japón el 95% de las escuelas infantiles tiene comedor escolar y los alumnos participan de forma activa en la elaboración de los menús escolares. Lo que no se permite en las escuelas japonesas son los productos que tengan mucha cantidad de azúcar, de grasas, de cafeína o incluso galletas o patatas fritas.
  • Aunque los niños coman en el comedor escolar no siempre comen la comida del centro, muchos padres y madres preparan las famosas “cajas bento” que llevan sus hijos al colegio o a la escuela y se promueve que los niños y las niñas hablen con sus compañeros sobre los alimentos que toma cada uno para que así se animen a probar alimentos distintos.
  • El batchcooking es una práctica habitual entre las familias japonesas y en esta preparación participa la familia al completo de forma activa porque se aprovecha para educar a los niños y afianzar la importancia de la alimentación en su salud.
  • En las comidas no se consume más que agua o té de forma habitual y es uno de los hábitos japoneses que también se empieza a fomentar durante la infancia, con todos los beneficios que aportan estas bebidas, además de evitar todos los perjuicios que tienen los refrescos para la salud sobre todo de los más pequeños.
Cinco buenos y sencillos hábitos japoneses que podemos copiar y practicar con nuestra familia para ser un poco más felices cada día. Share on X

Ikuji

Es más una forma de criar a los niños, un método de enseñanza con el que se fomenta un comportamiento respetuoso y disciplinado en el niño o la niña a través de la crianza positiva y la escucha activa. Es uno de los hábitos japoneses que requiere de más paciencia y empeño para desarrollarlo a lo largo del tiempo.

Se plantea en tres fases, la primera se extiende desde el nacimiento hasta que el niño cumple los cinco años de edad, aproximadamente. En esta etapa lo más importante es que el bebé se sienta querido y valorado.

La segunda etapa se inicia a los cinco años y llega hasta los 15 años aproximadamente y aquí se enfoca la educación a que sin dejar de sentirse querido y valorado por su familia, ahora tenga también responsabilidades según su edad y su madurez. En esta etapa los niños y las niñas en Japón se ocupan de distintos aspectos de la casa para valorar la importancia del trabajo y la educación en sus vidas, es una forma de que se sientan útiles y necesarios, de que aprendan a ser autónomos y de que valoren a su propia familia.

La tercera fase del Ikuji, arranca cuando el niño o la niña ha cumplido los 15 porque es cuando empieza a ser tratado como un igual dentro de su familia, asumiendo las consecuencias de sus actos, teniendo un espacio propio en su entorno y también en la sociedad.

Shinrin yoku

Quizás entre los hábitos japoneses más conocidos este estaría de los primeros. Lo podríamos traducir como “baños de bosque” y desde hace tiempo se está estudiando su efecto sobre la salud de las personas que los practican. Se trata de salir a pasear de forma habitual por entornos naturales, rodeados de árboles y hacer un paseo consciente.

Desde la Universidad de Stanford demostraron que cuando entramos en un bosque recibimos de forma inconsciente las sustancias químicas que fabrican los árboles con la intención de protegerse. Para nuestro organismo estas sustancias son muy beneficiosas ya que nos relajan y especialmente en los niños, bajan nuestros niveles de estrés de forma natural.

Kaizen

El orden es una asignatura pendiente en muchas personas y no digo niños o adolescentes, digo personas adultas que todos conocemos. Nunca es tarde para tratar de mejorar y este método está pensado para todas las edades así que se puede aplicar a todos los miembros de la misma familia y no miro a nadie.

Se trata de una metodología con la que aprendemos a ser más ordenados, hasta aquí la teoría, la práctica es sencilla y para los más pequeños puede ser incluso divertida.

Kaizen significa “bueno” y “cambio”, es la unión de dos palabras japonesas que juntas se pueden traducir por “sabiduría para cambiar” y siguiendo esta metodología se busca superar la pereza y la apatía a la hora de organizarnos cada uno.

Empezamos por una tarea que dure un minuto o dos y que podamos realizar todos los días a la misma hora, es importante tener en mente que solo tenemos ese tiempo para terminar la tarea cada día. La técnica es sencilla pero requiere de constancia para crear la rutina, hasta el día en el que nos salga sola, sin pensar y sin que nadie tenga que recordárnosla. 

Y así pasamos a otra tarea hasta convertirla en rutina. Es una forma de organizar nuestro día a día, nuestra cabeza y por supuesto nuestra propia casa con el último de estos sencillos hábitos japoneses que hemos reunido.

Lo mismo también te interesa…

Pilar Fonseca

Primero fui mujer, después periodista, luego esposa y ahora además de todo eso madre. Esto último me obligó a reorganizar todo lo anterior.
Me gusta escribir y comunicar.
Disfruto con un buen libro, una buena película, una buena serie, un buen viaje y una buena charla con amigos.
Podría alimentarme sólo de queso y chocolate acompañados de un buen vino, una que es mujer de gustos sencillos.

Artículos recomendados

1 comentario

  1. […] Buenos hábitos japoneses que podemos aprender para ser un poco más felices cada día. […]

Los comentarios están cerrados.